29/1/13

☼ Rabietas: causas y conclusiones

Madre mía con los 2 años...afortunadamente no todos los días hay episodios de rabietas en mi casa, aunque si interminables sesiones de Nooooos!. Gracias a Dios sólo a Claudia le ha dado por tenerlas, porque cuando se pone, se pone y que mis nervios soporten 2 niños berreando al mismo tiempo... creo que sería mucho pedir. Aunque, una vez más, será como todo... si tienes 1 niño con rabieta, pues soportas a 1, y si tuviera 2 pues me tocaría soportar a 2. ¡ No te queda otra!, ¿no?
 
Sobre todo noto que las rabietas de Claudia se producen más cuando está cansada, llega la hora de comer, o se le levanta de la siesta. Pensaba que estaba confundiendo el sueño y el hambre con una rabieta, pero he leído que las hay voluntarias e involuntarias. Las primeras cuando el niño, que poco a poco va dejando de ser bebé, quiere imponer sus normas. Y las segundas, motivadas por el cansancio y/ó hambre, no son más que una forma de expresarse de la única manera que, de momento, sabe.
 
En nuestro caso son sólo involuntarias. Y de lo leído saco como conclusión, que en el caso de las primeras, es decir las voluntarias, hay que mantenerse firme y no ceder ante las exigencias del niño. Aunque a veces debe ser muy difícil llevarlo a la práctica, debemos pensar que sólo así conseguiremos un niño educado, y que poco a poco esas rabietas cesen. Lo importante es transmitirle que le haremos caso cuando se calme. En el caso de las segundas, empatizar con él. Querer expresar como te sientes, y no poder hacerlo por falta de medios adecuados, como el lenguaje, debe ser muy frustrante. Por eso la empatía es el mejor arma para comprender a tu hijo, y ayudarle a superar ese episodio de frustración e impotencia.
 
Antes de leer lo que recomiendan los expertos (paciencia y apoyo), si he podido observar que de nada me sirve ponerme nerviosa o perder la calma, como mejor reacciona es cuando le cojo la cara le doy 4 o 5 besos, y le digo lo mucho que la quiero. No se si lo habéis probado, pero os garantizo que a mi me funciona ipso facto. Y es que una vez más... el amor es el mejor de los remedios.
 
 
Vía Pinterest
 
 
Y vosotros...
 
¿ Tenéis algún truquillo para detener las rabietas?

4 comentarios:

  1. jajaja! la foto es una maravilla! nada más verla te alegra el día! :D

    Uf, rabietas...mi gordito está empezando,...tiene mucho genio y cuando algo no sale como quiere se desespera y pega manotazos y protesta como un viejo gruñón -es pa verlo-

    A veces me pilla más animada y le doy mimos pero otras veces -lo admito- me pilla hecha polvo y le pego algún gritillo...pero sí, hay que controlarse y focalizar su rabieta...

    Un besazo y ánimo con tus dos preciosidades! ;))

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  2. Buenos días, preciosa!
    Mi hija mayor también tenía alguna de esas rabietas, la notaba cansada, hambrienta, como tú explicas. Muchas veces (tampoco es que estuviera todos los días enrabietada) lloraba tanto que se quedaba sin respirar, y eso me ponía a mí muy nerviosa. Pero se le pasaron, tal cuál llegaron, se fueron. Creo que salvo las primeras veces, que se me caía el mundo encima al verla así, supe canalizar esa rabieta a algo positivo, y también como tú, calmándola, y besándola.

    La que temo más, por el genio que empieza a demostrar es la pequeña. Sé que esta no se quedará sin respirar, pero puede ponerse muy tonta. Hasta ahora, con 18 meses, la he parado, cambiando la actividad, pero cuando tiene mucha hambre, se agarra a mi pierna, mientras estoy haciendo la comida, y no veas...

    Besos!

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  3. Hola Inés!
    Como bien dices, si es una rabieta provocada por hambre, cansancio, etc. yo creo que es su forma de expresar la frustración, intento tener empatía y entender porqué está llorando. En esos casos lo calmo y con cariñitos parece que funciona, al fin y al cabo no tiene la culpa. Pero como sea una rabieta de carácter o capricho sin sentido (del tipo quiero comprarme algo o no quiero hacer algo) ahí somos inflexibles, que llore lo que quiera, intento explicarle la situación y si sigue lo ignoro y le digo que cuando deje de llorar hablamos, así se calma el solito...
    Por supuesto que nunca consigan nada con una rabieta, entonces estamos perdidos!
    Besos

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  4. Ay madre, miedo me da esa fase...Yo no he llegado aún pero sí escribí un post en el blog con lo que dicen los estudios científicos y señalaban la importancia de separar el estado de tristeza y el de enfado. Sugerían que las rabietas van por fases, y en unos momentos domina la ira y en otros la tristeza. Y que lo importante era intentar detectar los segundos, porque es cuando el niño está receptivo para ser calmado. Pero imagino que de la teoría a la práctica hay un mundo, claro está. Mucho ánimo con el tema, espero que se vayan pasando. Besos!

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Gracias por tu comentario, me hace muy feliz.

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